Lapsus Medicus

Litro

Litre

Alfredo Pinzón-Junca • Bogotá, D.C. (Colombia)

* Envíe sus inquietudes, sugerencias o comentarios a: contacto@actamedicacolombiana.com - alfpin@hotmail.com Dr. Alfredo Pinzón-Junca: Especialista en Medicina Interna y Psicoanálisis, Hospital Simón Bolívar. Bogotá DC (Colombia).
E-mail: alfpin@hotmail.com

Recibido: 17/II/2021 Aceptado: 20/II/2021

DOI: https://doi.org/10.36104/amc.2021.2118


El uso de unidades de medida es común en la práctica médica diaria. Una de ellas es el litro y sus derivados, que se utiliza como equivalente de la dimensión física: volumen (es equiparable al decímetro cúbico, dm3).

Históricamente, el litro (L) apareció como una medida de «capacidad», usado principalmente para describir la cantidad de sustancia líquida o gaseosa que cabe en un recipiente (originalmente fue definido como el volumen ocupado por la masa de un kilogramo de agua pura a 4 °C), mientras que para cuantificar el «volumen» de cuerpos sólidos se determinó el metro cúbico (m3). Con el paso del tiempo, estas dos dimensiones, capacidad y volumen, han sido aceptadas como equivalentes, aunque en sentido estricto la primera se refiere a la espaciosidad de un recipiente o contenedor, mientras que la segunda es la magnitud métrica escalar del espacio que ocupa un cuerpo en las tres dimensiones (corpulencia); es decir, no son iguales, pero sí equivalentes, por lo tanto, se pueden utilizar indistintamente para indicar la cantidad de un medicamento o fluido, líquido o gaseoso.

Aunque el litro no pertenece propiamente al Sistema Internacional de Unidades (SI), es aceptado por este sistema a título de excepción como una medida alterna de volumen, en consideración a su trayectoria histórica. En cuanto al símbolo que lo representa, originalmente correspondió a la letra «l» (ele minúscula), pero desde 1979, la XVI Conferencia General de Pesos y Medidas propuso que se adoptara la letra «L» (ele mayúscula) para evitar el riesgo de confusión con el dígito «1» (uno). Por lo tanto, es mandatario utilizar el símbolo «l» o «L» (de preferencia este último), evitando el uso incorrecto de abreviaturas o contracciones como: lit, lts, ltr, Lit, Lt, Lts, etc. Además, se debe respetar las normas de escritura de los símbolos de unidades de medida, entre ellas:


Fuentes